Empiezo a pensar que a determinadas personas los gatos les abducen. En todos los barrios existe la figura de una persona que se dedica primorosamente a cuidarlos. Les cambia el agua a diario en bricks cortados por la mitad, los alimenta hasta el punto que se pueden ver gatos callejeros gordos como bibendums etc. Estos gatos esquivos sabiamente con cualquier otra persona, acuden maullando y ronroneando en cuanto detectan que la persona en cuestión ha llamado al ascensor de su casa. Todos, creo, hemos sido testigos de lo que narro. Refuerza mi teoria sobre la abducción gatuna, el último número de la revista Vogue acompañado de un estupendo regalo de 25 aniversario, conviertiendola en un número icónico especial para coleccionistas: una ilustración exclusiva del mito Karl Lagerfeld. Quiero dejar claro que la foto con la ilustración que acompaño a este post NO me pertenece (Dios me libre) y que mi ánimo es el de ilustrar esta mi humilde opinión.
Asombrado por el regalo, me pregunto:
¿todo vale cuando una persona con éxito se mete en camisas de once varas?
¿el pertenecer al grupo de los elegidos, por meritos propios, te da derecho de pernada?
¿ningún creativo o director de arte en la redacción de Vogue hizo sonar la voz de alarma?
Dando por hecho que este señor estará rodeado de aduladores y pelotas que le aplauden hasta cuando va al baño y esté a su vez está abducido por su gata Choupette, no comprendo cómo el resto de culpables de que esto haya salido adelante, no estén de patitas en la calle.
Que pena que con los magníficos ilustradores que hay, a este tio se le haya permitido publicar en una revista líder en el sector mundial de la moda semejante barrabasada al nivel de cualquier chino esquinero.
Me gustaria saber quién va a ser capaz de enmarcar y colgar la lamina en cuestión.
En fin lo dicho.. Choupette tiene abducido a Karl....
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